OCDE advierte que Chile se ubica entre los países que menos gravan con impuestos las emisiones de carbono

La situación de emergencia climática en que se encuentra el mundo se toma la Conferencia de las Partes (COP) número 28, que se inicia hoy en Dubai con un récord de asistencia y el desafío de tomar acciones concretas para atenuar el impacto del calentamiento global.

En el marco de dicha cumbre y para ponerse a tono con la discusión, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) publicó hace unos días un reporte en el que analiza el estado de la situación de los países miembros respecto a uno de sus principales mecanismos para mitigar el cambio climático: la aplicación de impuestos a las emisiones de carbono.

En este panorama, Chile registra resultados mixtos, ya que por una parte es el país que más aumentó la tributación de las emisiones de estos gases contaminantes en los últimos dos años, pero en el conteo total sigue siendo uno de los que menos grava este tipo de contaminación.

Así, según el organismo, entre el 2022 y el 2023 nuestro país aumentó en un 60% su tasa efectiva de gravamen a las emisiones de carbono en el transporte terrestre, siendo el que más incrementó dicho indicador entre el conjunto de naciones OCDE y las analizadas en el ranking, superando a Indonesia (38%), Argentina (28%), México (12%), Colombia (6%), Canadá (5%).

Según el análisis de la OCDE, Chile fue uno de los 17 países que vieron aumentar sus tasas aplicables al combustible diésel y a la gasolina en los últimos dos años. En nuestro país, el Mecanismo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Mepco) ajusta al alza el impuesto específico cuando el precio internacional del petróleo baja, y lo reduce cuando este se incrementa. También, el organismo explica que el aumento se produjo por la indexación de la inflación a los precios de los combustibles y, en definitiva, al carbono en el período.

El informe "Effective Carbon Rates 2023", del organismo multilateral, agrupa información de 72 países, tanto OCDE como no integrantes, que colectivamente explican cerca del 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero.

La tasa efectiva de impuestos es definida por la OCDE como la suma de permisos comercializables de emisiones, los tributos al carbono y los gravámenes a los combustibles, los que dan como resultado el precio que se cobra por las emisiones de gases de efecto invernadero.

Así, con datos a 2021, un 42% de las aproximadamente 40.000 millones de toneladas de emisiones de gases de efecto invernadero registraban un precio en los países de la muestra.

También, el documento enfatiza que en los últimos dos años los países han entregado alivios a los hogares para reducir el impacto financiero de la crisis energética, derivada de la guerra entre Rusia y Ucrania, lo que ha implicado que algunas naciones redujeran transitoriamente el cobro a las emisiones de gases de efecto invernadero.

Por ejemplo, en términos reales los impuestos al transporte terrestre se redujeron en los últimos dos años en el grupo de países, debido a bajas de tasas por los aumentos de precios de la energía o por la ausencia de mecanismos de indexación a la inflación

Bajo en el ranking total

El reporte de la OCDE continúa señalando que cerca de un 16% de las emisiones de gases contaminantes estaban gravadas con un precio de 30 euros o más por tonelada de CO2, mientras que apenas al 7% se les aplicaba un tributo de 60 euro o más por tonelada.

¿Cómo queda Chile en el conteo? Pese a los aumentos en lo más reciente, está en la parte baja de la tasa efectiva cobrada.

Así, el país aplica un precio de 15,98 euros por tonelada de CO2, ubicándose lejos de los países con los valores más altos, como Suiza (124,5 euros), Países Bajos (97,8 euros) y Luxemburgo (96 euros) y ubicándose en la plaza 39 del total entre las 71 naciones analizadas.

Así, está en niveles cercanos a Sudáfrica, Turquía y Marruecos, y por sobre Kenia, México, República Dominicana, Panamá, Ruanda, India, Australia, Uruguay y Estados Unidos.